La comisión conjunta para las Alianzas Público Privadas, que preside el senador Larry Seilhamer Rodríguez, realizó una vista ocular a la escuela elemental Federico Degetau II, en Aibonito en la que se pudieron constatar serias deficiencias en la construcción y el mantenimiento del plantel.

Esto, a pesar de que la escuela participó en el proyecto de Escuelas Siglo XXI para lo que se destinó una inversión de casi siete millones de dólares. 

"Realizamos un recorrido por la escuela y pudimos observar los vicios de construcción que resultan en paredes agrietadas, filtraciones por el techo y los suelos, humedad, entre otros; así como posibles fallas en el diseño, pues hay áreas del plantel que se inundan”, informó el legislador del Partido Nuevo Progresista (PNP).

Añadió que la directora del plantel, Carmen Alicea, explicó todas las fallas que tiene la escuela. "Es verdaderamente impactante y lamentable que una construcción que tiene sólo cuatro años se encuentre en estas condiciones tan deficientes”, sostuvo el vicepresidente del Senado. 

Alicea señaló que recibió el plantel el 2 de noviembre de 2012, pero que luego de eso nadie le dio ningún tipo de mantenimiento ni de seguimiento.

"Según nos explicó la directora, esta escuela iba a ser bilingüe, pero luego de que se compraron libros y hubo adiestramientos a maestros, al cambiar la administración -en enero de 2013- el proyecto quedó en nada. De hecho, en abril de 2014 se cancelaron los fondos para el mantenimiento de las Escuelas del Siglo XXI y sobre 40 escuelas se quedaron fuera de esa fase”, abundó Seilhamer.

El senador añadió que "los problemas de filtraciones y humedad son tan serios que hay salones que simplemente no se pueden utilizar, comida ha tenido que ser decomisada y hasta algunas pruebas META se dañaron porque se mojaron”. 

El presidente de la Comisión Conjunta para las Alianzas Público Privadas dijo además que "a los problemas con la infraestructura del plantel se le suma que como parte de algunos cambios que se buscan implementar se va a dividir la escuela para integrar a los estudiantes de la escuela Rosario Belber. Esto es preocupante, porque representará un problema de hacinamiento”.

Explicó que allí "hay que acomodar una matrícula de 394 estudiantes, lo que significará 30 estudiantes por salón. Además los estudiantes no van a tener un área pasiva recreacional y tanto el comedor como la biblioteca no tienen el espacio suficiente para la matrícula, porque se redujo considerablemente”.

Para Seilhamer, "también se estarían mezclando dos poblaciones estudiantiles totalmente diferentes, porque la Federico Degetau II incluye a estudiantes de kindergarten a sexto grado, mientras que la Rosario Belber es una escuela especializada que tiene estudiantes de hasta 21 años”.

Adelantó además que citarán a vista pública "a todos los que pudieran tener responsabilidad no sólo en la deficiencia en la construcción sino también en el mantenimiento o conservación y en la falta de adjudicación y rendición de cuentas de la inversión que se realizó en esta escuela”. INS