Unas 30 cuerdas de pasto no abonado se han estado quemando desde horas de esta tarde entre los municipios de Coamo y Santa Isabel, manteniendo activas las unidades de bomberos forestales en la zona sur de la Isla.

"Cerca de las 5:00 de la tarde se desató un incendio de pasto no abonado en la carretera PR 153 entre los municipios de Santa Isabel y Coamo frente a la ferretería Useras, en la que se quemaron unas 20 cuerdas, luego se tuvo que trabajar otro incendio forestal en la carretera PR 138 en el desvío sur de Coamo a Aibonito, donde también se quemaron otras 10 cuerdas de pasto no abonado”, dijo el comandante Roberto García Rodríguez, jefe de los bomberos en la zona de Ponce.

En la extinción de estos fuegos de pasto han estado trabajando bomberos de Coamo, Santa Isabel, el camión tanquero de Ponce con capacidad para llevar 3,000 galones de agua, junto a las unidades de bomberos forestales, apoyados por personal de la Oficina Municipal de Manejo de Emergencias de Coamo.

Mientras, el jefe del Cuerpo de Bomberos de Puerto Rico, Ángel A Crespo Ortiz, fue enfático en señalar que "estos incendios no son por combustión espontánea, nos preocupa que muchas personas no tomen conciencia del peligro para sus vidas, las propiedades y la salud de sus conciudadanos y le pegan fuego indiscriminadamente a terrenos cercanos a carreteras, aunque sabemos que muchos de estos incendio ocurren cuando se tira colillas de cigarrillo a la orilla de la carretera, entre otras causas, aunque en menor proporción”.

El humo de los incendios forestales está compuesto de una mezcla de gases y partículas microscópicas que se desprenden de la vegetación en llamas. El humo puede afectar los ojos, irritar el sistema respiratorio y agravar las afecciones de personas que padecen de enfermedades cardíacas y pulmonares crónicas.

El humo puede causar tos, irritación de los ojos, de la garganta, de las fosas nasales, dificultad para respirar, dolor en el pecho, dolor de cabeza. Además, el humo puede empeorar los síntomas de las personas que padecen de condiciones respiratorias preexistentes, tales como alergias respiratorias, asma y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica.