En un alarmante episodio de ciberseguridad, se ha informado que hackers chinos han logrado penetrar una vez más en los sistemas del Departamento de Estado de Estados Unidos, poniendo en peligro la seguridad nacional al robar más de 60 mil correos electrónicos. La noticia surge después de que un miembro del personal del Senado revelara los detalles del incidente.

El grupo de hackers responsables de esta intrusión es el mismo que previamente atacó la plataforma de correo electrónico de Microsoft a principios de este año, lo que demuestra su persistencia y capacidad para eludir las medidas de seguridad.

El empleado, que estuvo presente en una reunión informativa con los oficiales de Tecnología de la Información del Departamento de Estado, compartió que se mencionó que los hackers chinos habían accedido y saqueado 60 mil correos electrónicos de 10 cuentas diferentes del Departamento de Estado. Aunque no se dieron a conocer los nombres de las víctimas, se confirmó que la mayoría de ellas trabajaban en la región de Asia Oriental y el Pacífico.

"Tenemos que reforzar nuestras defensas contra este tipo de ciberataques e intrusiones en el futuro", declaró el senador Eric Schmitt, cuyo colaborador brindó información sobre la reunión informativa. El senador expresó su preocupación por la continua amenaza que representan los hackers chinos para la seguridad nacional de Estados Unidos.

Estas acusaciones han vuelto a tensar las ya frágiles relaciones entre Estados Unidos y China, ya que Pekín negó su participación en el ciberataque al Departamento de Estado. El incidente también ha generado un debate sobre la excesiva dependencia del Gobierno estadounidense de un único proveedor, en este caso, Microsoft, para servicios informáticos críticos.

Hasta el momento, el Departamento de Estado de Estados Unidos no ha emitido comentarios al respecto, y la oficina del senador Schmitt no ha respondido a las solicitudes de entrevista. La ciberseguridad continúa siendo una preocupación prioritaria para el Gobierno de Estados Unidos en un mundo cada vez más interconectado y vulnerable a amenazas cibernéticas.