La empresa matriz de Pornhub, Aylo, ha reconocido que obtuvo ganancias de videos que involucraban a mujeres forzadas a realizar actos sexuales en su plataforma. Este reconocimiento se produjo en un acuerdo con fiscales federales y conlleva una multa de US$ 1,8 millones, así como compensaciones para las víctimas de tráfico sexual como parte de un acuerdo de procesamiento diferido.

Aunque Aylo se declaró inocente de participar en transacciones monetarias ilegales relacionadas con ganancias del tráfico sexual, admitió que material ilegal fue publicado en su sitio y expresó su pesar por ello. Los fiscales no acusaron a Aylo de violar leyes federales de tráfico sexual, pero argumentaron que la empresa debería haber sido consciente de su colaboración con un grupo dedicado al tráfico sexual.

Según documentos judiciales, desde 2017 hasta 2019, una productora pagó a Aylo para publicar videos que incluían contenido no consensuado. Aylo recibió solicitudes de mujeres para eliminar dicho contenido en 2016, pero no las atendió adecuadamente ni verificó el consentimiento. Aunque retiraron los videos de la productora en 2019, algunos usuarios volvieron a publicarlos en línea.

El nuevo liderazgo de Aylo expresó su pesar por haber alojado dicho contenido y aseguró estar comprometido en evitar que se repitan incidentes similares. La empresa opera varios sitios web, incluyendo Mofos, YouPorn y MyDirtyHobby, y es propiedad de la firma canadiense Ethical Capital Partners.

El acuerdo de procesamiento diferido responsabiliza a Aylo por su papel en el alojamiento de estos videos, y el FBI indicó que la empresa debería haber actuado de manera más rápida para eliminarlos.

Este caso destaca los desafíos que enfrentan las plataformas en línea en relación con el contenido y la responsabilidad, así como la importancia de proteger a las víctimas de tráfico sexual.