La ciudad de Nueva York ha emitido una prohibición estricta contra el uso de la aplicación de videos cortos, TikTok, en dispositivos gubernamentales, sumándose a una tendencia creciente de medidas cautelares en el país debido a inquietudes sobre la seguridad cibernética.

TikTok, con una base de usuarios de más de 150 millones en Estados Unidos, ha sido objeto de escrutinio por ser propiedad de ByteDance, una importante firma tecnológica china. Las alarmas se han encendido debido a temores de una posible injerencia del gobierno chino en la aplicación.

La administración del alcalde Eric Adams ha justificado la decisión citando que TikTok "representa una amenaza para la seguridad de las redes de la ciudad". Todos los departamentos gubernamentales han sido instruidos para eliminar la aplicación en un período máximo de 30 días.

Mientras tanto, TikTok ha refutado estas acusaciones, garantizando su compromiso con la privacidad de los usuarios estadounidenses y desmintiendo cualquier vínculo de compartir información con el gobierno chino. Sin embargo, la posición de importantes autoridades de seguridad, como el FBI y la CIA, sobre la aplicación no ha sido favorable, identificándola como una posible amenaza a la seguridad nacional.

Esta reciente medida sigue los pasos de un intento del expresidente Donald Trump en 2020 de limitar el uso de TikTok. Sin embargo, esa acción fue obstaculizada por decisiones judiciales. Además, Montana ha buscado prohibir la plataforma en su totalidad, aunque esta decisión está siendo disputada legalmente.

Una encuesta de Reuters/Ipsos revela que casi la mitad de los estadounidenses están a favor de limitar el acceso de TikTok en dispositivos oficiales. Estas decisiones reflejan una creciente preocupación por la integridad de la información y la privacidad en la era digital, y es probable que continúen siendo un punto focal en el debate sobre la seguridad cibernética.