Increíble recuperación de víctima de brutal golpiza en Miami

Una cicatriz en la frente es la única herida visible que le queda a Danielle Jones de la brutal golpiza que la dejó en coma por 24 días.

A casi cuatro meses de la agresión, la joven de 23 años camina con paso seguro y aunque habla pausado, lo hace con claridad. Atrás quedó cuando modular una palabra era un gran esfuerzo.

Aunque a simple vista Jones parece completamente recuperada, todavía hay un largo camino: debe seguir recibiendo fisioterapias y terapias de lenguaje al menos una vez a la semana. Otra de las consecuencias de la agresión es que mantiene lagunas en la memoria.

Jones contó que debido a esto, no recuerda la agresión que recibió por parte de Byron Mitchell, un entrenador personal de 36 años. "Tampoco quisiera recordarla”, añadió, aunque puede que sí lo haga en un futuro. Su memoria ha ido recuperándose al mismo tiempo que su cuerpo lo ha hecho.

Lo último que recuerda con claridad es el día que lo entrevistó para alquilarle una habitación en su apartamento en el downtown de Miami. Le pareció un buen joven, sin antecedentes penales y con una destacada hoja de vida.

Ella había rentado el apartamento con otra persona que decidió irse sin notificar. Desesperada por pagar la renta, acudió a Craiglist para buscar a un nuevo compañero de habitación y así fue conoció a Mitchell quien se iba a quedar solamente por un mes.

De sus amigos ha recabado que en la semana antes del ataque (la primera que él estuvo en la casa), ella comenzó a sentirse incómoda. Al parecer él le escribía frecuentemente mensajes de texto y ella llegó a quejarse diciéndole que "no era su novia”.

Jones fue atacada brutalmente en su apartamento el pasado 14 de febrero por Mitchell, a quien había alquilado una habitación en su apartamento. Según la Policía, Mitchell la golpeó, apuñaló y estranguló hasta casi ocasionarle la muerte antes de llamar al 911 para pedir ayuda. Tras la golpiza, Jones estuvo en coma por 24 días en el Centro de Traumatismo Ryder del Hospital Jackson.

"Esto ha sido un milagro”, dijo su madre, Aimee Nikolov, descendiente de cubanos, quien recordó que los doctores pronosticaron que la joven podría permanecer en coma por varios años o que si se despertaba, podría quedar paralizada y en sillas de ruedas.

La agresión no ha cambiado los planes de Jones. Ella quiere seguir persiguiendo su sueño de convertirse en una oficial de Policía y en psicóloga, y de manera inmediata quiere recuperarse lo suficiente para volver a hacer ejercicios, una de sus actividades favoritas. Puede que de la experiencia, le gustaría también ser conferencista para hablar de su experiencia y aconsejar a otras personas a ser más precavidos en las redes sociales, como Craiglist.

Tras su arresto el 15 de febrero, el entrenador personal se ha declarado inocente, alegando que actuó en defensa personal cuando la joven intentó apuñalarlo con un cuchillo. La mamá de Jones rechaza esta aveseración. "El señor no tiene ni un rasguño, ni una cortadita, ni un arañazo...él dice que la desarmó de una cuchilla y no tiene ni una marca. Mide 6 pies, dos pulgadas...mi hija mide 5 pies, 3 pulgadas y pesa 115 libras. Una menudita”, dijo a el Nuevo Herald el 29 de febrero.

Hasta el momento Mitchell permanece detenido desde el 15 de febrero en espera de su juicio. El 1 de marzo, un juez de Miami-Dade le negó la opción de salir en libertad bajo fianza y la fiscalía aumentó los cargos en su contra a intento de asesinato premeditado.

Kaitlin Cabot, prima de la víctima, inició una campaña para recaudar fondos y ayudar con los costos médicos de Jones. Para este viernes, habían logrado recaudar $48,000 del objetivo de $50,000.