Un gran jurado federal del Distrito de Puerto Rico presentó una tercera acusación enmendada contra cuatro individuos por el asesinato del banquero Maurice Spagnoletti, quien llegó a la Isla en 2010 para trabajar en la reestructuración de Doral Bank y falleció tiroteado en el verano de 2011.

Además, la acusación incluye la acusación contra esos cuatro sujetos junto con otros dos por conspirar para distribuir sustancias controladas y posesión de armas, así como por promover un delito de narcotráfico.

La fiscal federal Rosa Emilia Rodríguez Vélez informó que cuatro de estos individuos, Luis Carmona Bernacet (alias "Canito Cumbre”), Yadiel Serrano Canales ("Motombo”), Rolando Rivera Solís y Alex Burgos Amaro ("Yogui”) enfrentan un cargo por utilizar un arma en relación con un delito de narcotráfico que resultó en el asesinato del banquero Spagnoletti.

En la acusación se alega que desde el año 2000 hasta el 2014, en los municipios de San Juan, Trujillo Alto, Guaynabo y Bayamón, los acusados Carmona Bernacet, Serrano Canales, Rivera Solís, Burgos Amaro, así como Alan Lugo Montalvo y Fabiany Almestica Monge, poseían con intención de distribuir cocaína, crack y marihuana.

Carmona Bernacet también está acusado de los asesinatos de William Castro, el 30 de diciembre de 2002, y de René Cruz, el 6 de diciembre de 2006.

En cuanto al asesinato de Spagnoletti, el gran jurado acusó a Carmona Bernacet, Serrano Canales, Rivera Solís y Burgos Amaro, de portar armas durante y en relación a un crimen de narcotráfico y, en el curso de ese crimen, asesinar al banquero.

"Las agencias de ley y orden federales y estatales trabajaron incansablemente durante la investigación de esta organización criminal violenta, cuyos miembros son responsables de al menos tres asesinatos, uno de los cuales fue el asesinato del banquero Maurice Spagnoletti en el año 2011”, dijo Rodríguez Vélez.

De ser declarados culpables, los acusados enfrentan una sentencia mínima de 15 años hasta cadena perpetua por el cargo de conspiración de drogas y desde cinco años hasta cadena perpetua por los cargos por armas.

Mientras, por el asesinato de Spagnoletti, los acusados ​​podrían enfrentar la pena de muerte o hasta vida en prisión.INS

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